Al leer sobre Montessori, a menudo os encontraréis con las palabras “Las Tendencias Humanas”. La Dra. Montessori explica las tendencias humanas como comportamientos que pertenecen a todos los seres humanos; son inertes y el hombre las desarrolla para adaptarse, explorar y modificar.

En nuestras aulas observamos al niño y es a través de esta observación que podemos entender cuáles son sus necesidades; al comprender estas necesidades, podemos apoyar las tendencias humanas y, por lo tanto, ayudar al niño a prosperar y a alcanzar su máximo potencial como persona. La Dra. Montessori identificó las siguientes tendencias humanas: movimiento, curiosidad, exploración, orientación, orden, gregarismo, independencia, comunicación, autocontrol, exactitud, repetición, perfecciones, cálculo, trabajo, imitación, concentración, abstracción e imaginación creativa. Todas estas son tendencias con las que nace el niño y tienen lugar durante diferentes etapas de desarrollo.

A continuación, os ponemos algunos ejemplos de cómo se desarrollan estas tendencias y cómo las apoyamos dentro del aula:

  • El movimiento permite que el niño aprenda, observe, toque y conozca lo que le rodea. Este movimiento trae consigo conocimiento ya que el niño cuando se mueve descubre. Por consiguiente, es importante la liberta de movimiento. Por ejemplo, en nuestra aula el niño puede elegir su propio trabajo teniendo libertad de movimiento. Este movimiento fomenta la independencia, la exploración y el sentido de orientación. Montessori no solo se refirió a la independencia como una tendencia física sino también mental. El niño sólo puede expresar su independencia dentro de un grupo y este comportamiento está relacionado con el gregarismo.
  • Cuando un niño es curioso se sale de su camino para seguir descubriendo. A medida que el niño comienza a crecer, esta curiosidad también crece: el niño siente curiosidad por las relaciones entre las cosas, por el mundo que lo rodea y por los cambios que se suceden. Es para satisfacer esta curiosidad que el niño se motiva a explorar; un comportamiento conduce a otro. En nuestras aulas apoyamos esta curiosidad dándole al niño todas las oportunidades para explorar y crecer, seguimos al niño y por lo tanto llevamos su interés al siguiente nivel.

“The child possesses them in potentiality at birth, and makes use of them to build and individual suited to his time”. Mario Montessori- The Human Tendencies and Montessori Education (1956)