
Cynthia Davies
Me uní a TEMS allá en el 95 como maestra de Year 5. Una de las cosas que más me chocaron fue la atmósfera cordial y cooperativa del colegio. Tanto los alumnos como el personal daban la bienvenida a los recién llegados y siempre estaban dispuestos a echar una mano. Muchos años después, el colegio ha crecido, pero la cordialidad y el espíritu de cooperación persisten y son evidentes en cada aspecto de la vida escolar.
Nuestros estudiantes sobresalen por su empatía, tolerancia y habilidad de comunicarse con otros. Todos ellos, valores que fomentamos. Los estudiantes aprenden a expresarse con seguridad y a entender los sentimientos de otros a través de teatro, juegos de roles y trabajos en grupo.
El departamento de Primaria ayuda a recaudar dinero para caridad, y siempre estoy sorprendida con la generosidad y la iniciativa de los estudiantes. Trabajan con entusiasmo para ayudar a otros y creen firmemente en la importancia de marcar la diferencia.
Los estudios por supuesto también son importantes, ¡en Primaria trabajamos duro! Todo el personal comparte ideas y experiencias demostrando este espíritu cooperativo al que me refería. A través de un currículo multidisciplinario y actividades prácticas, nuestro objetivo es que el aprendizaje de nuestros alumnos sea activo.
El trabajo del Departamento de Primaria es un puente importante entre Infantil y Secundaria; los estudiantes son suficientemente mayores para empezar a hacer cosas de manera más autónoma pero a la vez necesitan dirección por parte del maestro. Nuestro objetivo como educadores Montessori es ayudar a los estudiantes a conseguir esa autonomía; ayudarles a creer en ellos mismos y en su habilidad para lograr objetivos y enseñarles cómo el trabajo duro conduce a grandes cosas. Para ello, todos los miembros del cuerpo de maestros trabajan como un dedicado equipo. Los maestros y profesores apoyan no solo a sus propios alumnos, sino también al resto de estudiantes del colegio para alcanzar estas metas.
En mis años de experiencia en TEMS, he visto a muchos niños y niñas incorporarse a la edad de tres años y salir al mundo a la edad de dieciocho, preparados para grandes logros. Me siento orgullosa del grano de arena que cada uno de nosotros ha puesto a esa preparación. ¡Estoy deseando seguir haciendo esto por muchos años más!